La violeta despidió un perfume más intenso, como si hubiera decidido derretir de golpe el inmenso desierto helado para transformarlo en un mar azul y caliente, o en un prado de terciopleo verde.
Gianni Rodari
Cuentos por teléfono - Una violeta en el Polo Norte
1 comentario:
¡Rodari! ^^
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